¿Sientes curiosidad por los blanqueamientos dentales basados en el carbón activado? Pese a la popularidad de esta técnica, a las numerosas recomendaciones de personajes públicos y a la viralidad de ciertos vídeos e imágenes demostrando sus efectos blanqueadores, este material está totalmente desaconsejado por expertos en salud bucodental. Sigue leyendo y descubre los riesgos de usar este tipo de productos.
Basta con googlear el término “carbón activado” para encontrar en la web toda una serie de anuncios promocionales sobre esta sustancia. Lo mismo ocurre en plataformas como YouTube, que cuentan con numerosos tutoriales sobre el uso de pastas y polvos compuestos por carbón activado. Aunque aparentemente los resultados son positivos, ya que las piezas dentales pueden aclarar su tonalidad, la realidad es que estos productos no hacen sino dañar el esmalte con su capacidad de abrasión.
🦷 ¿Qué es el carbón activado?
Se trata de una sustancia de origen vegetal muy abrasiva. Debido a sus propiedades, se emplea para acciones como la purificación de agua potable, la extracción de metales, el tratamiento de casos de intoxicación, el control de las emisiones de los vehículos…
🦷 ¿Cómo funciona el carbón activado en los dientes?
El principal reclamo para atraer a los consumidores hacia los productos basados en el carbón activado es la naturalidad de dichos compuestos. Puesto que las marcas que comercializan esta sustancia aseguran emplear carbón 100% orgánico, son muchas las personas que se animan a probarlo en sus dientes. Así, los productos de carbón activado aseguran ser idóneos para eliminar las manchas externas de las piezas dentales. Por tanto, muchos consumidores deciden aplicar esta sustancia en su cepillo y frotarse los dientes (las sonrisas negras parecen haberse convertido en toda una tendencia en Instagram). Si bien los dientes pueden quedar más blancos tras las sesión de frotado, es importante señalar que esto no se debe a la efectividad del carbón para aclarar la sonrisa, sino a su elevada capacidad de abrasión. Es decir: no aclara la capa superficial del diente (esmalte), directamente… ¡la elimina!
🦷 ¿Qué efectos tiene?
Es importante destacar que no existe evidencia alguna de los efectos positivos del carbón activado en los dientes. Sí las hay, por el contrario, de los riesgos que conlleva su uso. No solo trae consigo consecuencias negativas con respecto a la salud bucodental, también es perjudicial cuando se usa en dietas detox, batidos adelgazantes… ¿El motivo? Uno de los principales peligros es el riesgo de deshidratación, pues el carbón activado es capaz de retener cualquier cosa (empezando por aquellos líquidos menos densos: agua, saliva…).
Como puedes ver, pese a la popularidad de esta sustancia, los resultados son de lo más perjudiciales. ¿Nuestro consejo? Deja tu salud exclusivamente en manos de profesionales. Los blanqueamientos caseros, pese a su aparente efectividad, ocultan consecuencias muy negativas. Por eso, la única alternativa fiable es optar por tratamientos de confianza aplicados por expertos en el sector. Te animamos a consultar nuestra sección de estética dental. Solicita información sin compromiso acerca de nuestros tratamientos seguros y efectivos.