Los dientes temporales, o dientes de leche, cumplen importantes funciones para el normal crecimiento y desarrollo del niño, por lo que deben ser vigilados y tratados como si de la dentición permanente se tratara.
Desarrollo de la dentición temporal
Los dientes temporales empiezan a formarse ya a las 6 ó 7 semanas de vida intrauterina, se van desarrollando dentro de los huesos maxilares y normalmente empiezan a hacer erupción en la boca del niño alrededor de los 6 meses de edad.
Generalmente, a los 3 años de edad los 20 dientes temporales han hecho su erupción. Cada diente debe salir a una determinada edad, aunque variaciones de 6 meses a 1 año en la fecha de aparición pueden considerarse completamente normales. La adecuada secuencia de erupción y la correcta posición de estos dientes en las arcadas tendrá una importancia decisiva en el desarrollo de la cara del niño.
Un aspecto importante que se debe tener en cuenta es que hay mayor número de dientes permanentes que de dientes temporales, por lo que habrá piezas dentarias, como el «molar de los 6 años», que no se cambian.
Por este motivo, pueden observarse espacios entre los dientes temporales; estos espacios permitirán que las piezas permanentes, de mayor tamaño, se coloquen correctamente, lo que posibilita una adecuada forma de morder.
Alteraciones más frecuentes de los dientes temporales
La dentición temporal puede verse afectada por numerosas alteraciones que en muchas ocasiones pueden ser fácilmente tratadas, lo que permite mantener el diente en la boca el tiempo suficiente para la correcta erupción del permanente.
De estas afecciones, las dos que con mayor frecuencia se producen son las caries y los traumatismos.
- Caries
Los dientes temporales afectados por caries deben ser obturados (empastados) de forma similar a como se hace con los dientes definitivos. Una caries muy profunda en un diente temporal puede provocar alteraciones en el diente definitivo que está debajo. Cuando la caída del diente afectado está muy próxima, se realiza su extracción para permitir la correcta salida del permanente.
- Traumatismos
Los traumatismos dentarios son muy frecuentes en los niños, especialmente en la región de los incisivos superiores. Pueden provocar la fractura e incluso la pérdida prematura del diente.
En los casos en que es posible, se restaura la pieza para mantenerla en boca el tiempo necesario; si no es posible restaurar la pieza, hay que extraerla. Cuando se prevé que la erupción del diente definitivo va a tardar tiempo, se debe colocar un mantenedor de espacio que permitirá que los dientes no se junten, impidiendo la erupción del permanente. Estos tratamientos se pueden aplicar sea cual sea la causa de la pérdida dentaria prematura.
Se debe tener en cuenta que, si se pierde un diente temporal 4 ó 5 años antes de su fecha normal de caída, se producirá un retraso en la salida del permanente, y si se pierde cerca de la fecha de caída normal se producirá un adelanto de la salida.
Ambas situaciones pueden ser perjudiciales para la colocación definitiva de los dientes en la boca.
Continuaremos la próxima semana con Cuidados y control de la dentinción temporal y consejos para los padres……